En la década del 60, la familia Salvo vendió la propiedad en condominio y varios intelectuales de la época adquirieron algunos apartamentos.  De esta manera, el Palacio fue re-modelándose y muchas de sus obras de arte de gran valor fueron perdiéndose a lo largo del tiempo. En el primer piso, donde se ubica La casa del Billar, toda el ala derecha fue vendida a diversos compradores, por lo que no se ha podido encontrar obra alguna tampoco.

Dentro de las muchas actividades que se desarrollaron en el Palacio, así como bailes en el entrepiso de música disco y cumbia u obras de teatro en el subsuelo, también opera una Radio con una historia particular. La Radio Nacional debió cambiar su nombre en la época de la dictadura ya que fue censurada. Pasó a llamarse CX 30 La radio. Ésta fue la primera operadora de radio con tele-platea. 

 

Este Palacio también tiene diversos simbolismos de la alquimia y la masonería, ya que el arquitecto practicaba esa filosofía además de ser nazista. Su afinidad con el nazismo puede observarse en la base de las escaleras, donde ciertos simbolismos relacionados aparecen representados. Posteriormente, Palanti abandonó Uruguay para irse a Italia y construirle a Mussolini un edificio de inmensas proporciones, que jamás fue terminado.

En cuanto a la alquimia, pueden observarse tanto en el suelo como en el techo. Se presenta la flor de lis, los octágonos rodeados de un enorme cuadrado, entre otros. 

A su vez, la PS que se observa en reiterados espacios del Palacio no tiene una única significancia (Palacio Salvo). El "Priorato de Sion", también firmemente relacionado con el número ocho al igual que la aqluimia, es una organización depositaria de una serie de secretos que le costaron la vida a los Templarios. Tiene como símbolo también la flor de lis, debido al Priorato, así como la cruz que caracteriza a los Templarios.